SPRINT

¿POR QUÉ?

El motor que impulsa este proyecto se basa en la necesidad de disponer de información fiable y representativa a través de métodos adecuados. Los dos vacíos principales que se quieren abordar son: (1) la falta de estudios fundamentados en intervenciones basadas en la evidencia, y (2) la predominancia de un enfoque jerárquicamente organizado a la hora de encontrar soluciones para reducir desperdicio alimentario .

La eliminación de estas deficiencias reportará una larga lista de mejoras en lo que se refiere a la comunicación y entendimiento entre las partes interesadas. Además de fomentar un ambiente más imaginativo en el momento de proponer soluciones y posibles intervenciones o de identificar carencias y causas. El enfoque sistémico que SPRINT quiere conseguir permitirá la creación e implementación de leyes efectivas y bien informadas.

Así, se quiere mejorar la adaptabilidad de las estrategias, en distintos contextos, a través de la comprensión colectiva de todos los aspectos involucrados.

METODOLOGÍA

El proyecto de investigación de intervención se llevará a cabo a través de un proceso conformado por 6 pasos.

1. Identificación de los problemas: Se examinará el estado inicial de los patrones de generación de desperdicio alimentario a través de una encuesta nacional.
2. Compromiso de las distintas partes interesadas y cocreación: Impulsar la colaboración entre todas las partes interesadas de cada contexto estudiado para diseñar posibles intervenciones.
3. Desarrollo de herramientas tecnológicas: y de otros materiales necesarios para realizar las intervenciones.
4. Refinamiento y despliegue de la intervención: Las intervenciones se realizarán en los 3 escenarios mencionados anteriormente durante un período de 12 meses.
5. Evaluación de impactos: Medir la diferencia del derroche antes y después de la intervención, así como el impacto ambiental, social y económico de las intervenciones.
6. Difusión de resultados: Maximizar el valor de los resultados obtenidos con el proyecto.