CREDA participa en un proyecto europeo para evitar la generación de pérdidas alimentarias a causa de las normas de comercialización instauradas

  • El proyecto BREADCRUMB tiene el objetivo de analizar y proponer soluciones ante la situación que se vive actualmente en cinco cadenas de valor: frutas y verduras, carne, huevos, cereales y pescado
  • Chema Gil, representante del CREDA en el proyecto, asegura que “participar en BREADCRUMB es un reto, ya que es la primera vez que el CREDA se enfrenta a un caso de modelado”

02 de febrero de 2024

El Centro de Investigación en Economía y Desarrollo Agroalimentario es una de las 22 entidades integrantes del nuevo proyecto europeo BREADCRUMB, una iniciativa enmarcada en el programa de ayudas a la investigación Horizon Europe de la Comisión Europea. El objetivo de este proyecto es proponer soluciones y prevenir las pérdidas y el desperdicio alimentario generado por las normas de comercialización del sector. Éstas son un conjunto de estándares impuestos para que el mercado sea único y se abastezca de productos agrícolas de calidad normalizada que satisfagan las expectativas de los consumidores y consumidoras.

Ante esta situación, BREADCRUMB pretende proporcionar una comprensión empírica utilizando los estudios y la evidencia recogida para demostrar que este conjunto de normas de comercialización genera una determinada cantidad de pérdidas alimentarias durante toda la cadena de suministro. Así, el proyecto busca dar salida a los alimentos subóptimos, que no cumplen los estándares, pero que siguen siendo seguros por el consumo.

La investigación de BREADCRUMB se dedicará, principalmente, a las cadenas de suministro de cinco productos básicos en la dieta humana, que además registran unos porcentajes elevados de desperdicio: fruta y verdura (43%), carne (23%), huevos (29 %), cereales (20%), y pescado (51%).

Chema Gil, doctor en Economía y director del CREDA, lidera la participación del centro en este proyecto. Gil es contundente, “es un reto para nosotros“. Aunque, anteriormente, el centro catalán ha participado en iniciativas sobre el desperdicio alimentario, “es la primera vez que nos enfrentamos a un reto de modelado que nos abrirá las puertas a nuevas propuestas de proyectos sobre este tema, tanto en el ámbito nacional como internacional”.

La propuesta de iniciativas de este tipo “abrirá las posibilidades de análisis. Con el uso de datos sectoriales, se podrán cuantificar los efectos de distintas intervenciones desde una perspectiva global y holística”. Además, en un futuro “este tipo de modelos se podrán aplicar a analizar los efectos de regulaciones públicas y estrategias empresariales, así como los efectos rebote que se puedan generar“.

En un ámbito general, esta iniciativa busca innovar: (1) en el apoyo a la toma de decisiones, informando tanto a la Comisión Europea, como a los Estados miembros, sobre las intervenciones que se pueden realizar para prevenir las pérdidas; y (2) en la orientación a las empresas alimentarias para mejorar el acceso de otros tipos de alimentos a los mercados. Así, BREADCRUMB es un proyecto que generará impactos científicos, sociales, económicos y tecnológicos, ya que además de buscar soluciones al desperdicio alimentario, también pretende mejorar el acceso al mercado de los alimentos subóptimos.

Para alcanzar sus objetivos, BREADCRUMB utilizará un enfoque multiactor que garantice la participación activa de una gran variedad de actores entre los que se encuentran empresas alimentarias, organizaciones de I+D, asociaciones sectoriales, etc. Éstos se dividirán en 6 paquetes de trabajo (work packages): identificación de las normas de comercialización, creación de estimaciones, selección de soluciones, mejora del potencial de alimentos subóptimos, ampliación de los resultados, y gestión del proyecto.

El proyecto BREADCRUMB está liderado por Eigen Vermogen Van Het Instituut Voor Landbouw (Bélgica) y cuenta con un total de 22 entidades participantes de 7 países: Alemania, Bélgica, Dinamarca, Eslovenia, España, Italia y Portugal. La representación de España está repartida entre ANECOOP Sociedad Corporativa (Valencia), la asociación Organización de Productores Pesqueros Pescado Azul de Cataluña (Barcelona), PNO Innovation SL (Barcelona), AINIA (Valencia) y el CREDA (Castelldefels).