Publicado el 2 de julio de 2020
El 75% de los participantes ha visto modificada su actividad por la crisis de la COVID19, mayoritariamente debido a la disminución tanto en la demanda de productos como en el número de clientes, así como al cierre de algunos canales de comercialización. Por el contrario, el número de trabajadores fijos es el aspecto que se ha visto menos alterado.
Si algo ha demostrado la crisis de la COVID19 es la esencialidad del sector agroalimentario que ha mantenido su funcionamiento durante todo el estado de alarma, asegurando la correcta provisión de alimentos. Aunque ha sido uno de los pocos sectores que no ha parado su actividad durante este tiempo, la complejidad de la situación ha obligado a tomar medidas excepcionales para adaptarse a la nueva situación y a los requisitos sanitarios. En el sondeo llevado a cabo por CREDA-UPC-IRTA, el 75% de los participantes afirmaba haber visto modificada su actividad de alguna manera durante la crisis del COVID19.
Entre los aspectos que más se han visto afectados destacan la demanda de productos, el número de clientes y los canales a través de los que comercializa. En el análisis agregado, considerando todos los sectores y etapas, se puede intuir que los aspectos que más se han visto modificados son aquellos relacionados con canales de comercialización específicos como el canal HORECA. La paralización del turismo y la restauración ha afectado a muchos productores que dependen en gran medida de estos canales de venta. Sin embargo, los cambios en los patrones de compra de alimentos también han favorecido la proliferación de iniciativas de venta a domicilio directamente desde pequeño productor, como ya se habló en otros covidbytes.
A pesar del impacto negativo en el sector, esto no se traslada en una fuerte reducción del número de trabajadores fijos, solo identificado por el 15% de la muestra. La rápida adopción de estrategias de adaptabilidad habría favorecido esta situación. Especialmente relevante teniendo en cuenta que el 25% de las empresas reflejaron un incremento de los precios de las materias primas a la vez que un 31% detectaron una disminución en el precio de los productos que comercializan.
Gráfico 1 Porcentaje de empresas que han visto disminuido o aumentado algún aspecto de la actividad por la crisis de la COVID19:
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